El servicio de cloud o computación en la nube, el cual consiste en adquirir capacidad de procesamiento en modo de servidores virtuales para almacenar, procesar, administrar datos y ejecutar aplicaciones, es una opción que ha ganado terreno de manera importante por los beneficios que puede traer a las empresas.
El ahorro de costos, seguridad de datos y sistemas, actualización tecnológica, entre otras ventajas, ha hecho que el mercado mundial creciera un 30% en 2022, según datos de Gartner. Sin embargo, antes de apresurarse a adquirir el servicio, nuestros especialistas en la materia le recuerdan la importancia de tomar una decisión informada, pues en esto radica poder realizar una migración exitosa a la nube.
“La clave del éxito cuando se va a migrar depende mucho de la calidad del proveedor y del alcance del servicio que le brinda la empresa a la que se le va a comprar el servicio”, aclara Miguel Jiménez, nuestro arquitecto de NUBE 4.0.
En primera instancia, el especialista sugiere a las empresas definir con claridad cual es el objetivo de migrar a la nube, y conocer a detalle los tipos de servicios, para elegir correctamente lo que se busca: un servicio de infraestructura en producción, almacenamiento de datos, respaldo y recuperación, ambiente de desarrollo o si lo que se necesita es una herramienta de recuperación ante un evento que pueda comprometer la integridad de los sistemas críticos de la empresa, entre otros.
Otro de los puntos necesarios para tener una buena experiencia de migración es acompañarse de un arquitecto de soluciones de nube, independiente o solicitarlo al proveedor, para que estudie y profundice en las verdaderas necesidades del cliente. La presencia de un profesional de esta calidad es imprescindible para entender qué tipo de infraestructura tiene la empresa, cómo se comunica entre sí, cómo el usuario final consume los servicios y cuál es la capacidad de procesamiento requerida. Este análisis facilita el diseño a la medida del servicio de nube que se sugiere comprar.
“En el mercado existen proveedores que venden en paquetes los servicios de cloud y llaman la atención de los clientes por sus precios, pero la mayoría no ayuda en la migración o lo hacen de forma muy básica. El adquirir esta modalidad puede significar una mala experiencia de migración porque en muchas ocasiones el plan adquirido debe ajustarse con otras funcionalidades y características que un principio no estaba contemplado y pueden implicar aumento de costos y problemas en la operación”, explica Miguel Jiménez.
Por eso, se sugiere conocer la experiencia del proveedor prestando servicios en la nube, las capacidades de procesamiento, el protocolo de servicio al cliente para atender consultas e incidentes que opera, calidad de certificaciones que posee, tiempos de latencia, además de que cuente con un equipo humano capacitado y con la experiencia requerida para asegurar un exitoso paso hacia la nube.